Si Hades fuera chilango y Atenea la Primera Dama

noviembre 28, 2005

Noche de ronda.

En esos días en los que se sale a buscar algo que no se sabe, justo a la mitad de una reflexión inspirada por el rojo en el cuerpo exigido del cigarro, recibí un mensaje de instrucciones simples con la orden de apostarse en un bar para cumplir la azarosa misión de dar fin a algunos litros de alcohol. Así que sin pensarlo, me dirigí a tan sacro lugar resignado a alterar mi conciencia con algo más que mal de amores. Los detalles se encontrarían agazapados entre la botana y uno que otro comentario ácido, pero ya entre alcohol a quien le importa.

Poco a poco los amigos arribaban a aquella mesa cuadrada, lugares suficientes para las grandes amistades; como la espera en esos lugares siempre exige de entrenamiento tuvimos que comenzar el ataque al enemigo etílico con un par de escaramuzas tequileras que nos permitieron retomar algo de nuestra destreza estudiantil. Las reuniones con los amigos de la Uni siempre han sido así, y siempre nos preguntamos si no será la última de las reuniones.

Sentados en aquella mesa comenzamos con los típicos reclamos y mentadas de quienes no se han visto por mucho tiempo, la primera ronda transcurre entre lo superfluo y los cacahuates que son botana obligada para quienes saliendo del trabajo se acuerdan que no han comido. Del porque nos habíamos reunido aún no sabíamos nada, pero poco importa. Y así sin ton ni son alguien sentenció: ?Me voy a divorciar?. Ese tequila, confieso, quemó hasta las buenas intenciones.

Entre la impresión y la explicación pensé: ?si alguna relación merecía un premio era esa, solo que el Oscar a mejor actriz y actor no estaban en la lista?. Ya no puse mucha atención a las atenuantes del caso, lo cierto es que en este grupo de amigos ya hay un par en la segunda ronda de matrimonios, uno más es reciente divorciado y buscando, una más en unión libre, dos que no salimos ni en rifa y uno más que dice que lo mejor está de este mismo lado de la acera.

En algunas ocasiones pienso que esta vida que nos ha tocado vivir es como salir de compras: el envase vende, si no te gusta lo cambias por otro, total hay varias marcas. Si se complica, a la basura. Para que tener una entera si se pueden tener dos medias. Arrendar o comprar: uno nunca sabe. Hay que probar para ver a que sabe. Quién necesita reparar, sale mas barato comprar otra que arreglar la anterior. Frases como estas encontraré tantas que me hará falta espacio, si la mentira no me engaña ahora si esta mas cañon mantener que recortar.

Vivir exige respirar, aunque nunca se sepa lo que se respira, o porque o para quien, lo importante es respirar y lo demás es lo de menos.


1 comment(s):

Las vueltas que da la vida.
Y lo que (nos) les falta!
Esas reuniones son chidas. Como minivacaciones...

By Anonymous Anónimo, at 10:53 a.m.  

Pasele marchantito

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