Si Hades fuera chilango y Atenea la Primera Dama

septiembre 07, 2004

Mi jefe

El de hoy aprendí a respetar a mi jefe. Ese tipo desde que entre a trabajar en esta empresa me ha dicho que hacer y en ocasiones como hacerlo, me parece desde hoy un tipo admirable; cuando lo conocí la mayoría de mis pensamientos hacía él giraban alrededor de encontrar la explicación del porque un tipo como él podía ostentar tal puesto, o mejor aún, como podía ostentar tal responsabilidad. Después de un tiempo, concluí que era un idiota y que hasta un mono bien entrenado podría desempeñarse mejor. Mi concepto de él cambio radicalmente el día de hoy.

Hace ya algunos meses las cosas en la empresa no marchan bien, el poco crecimiento y la competencia nos tiene en jaque desde hace mucho, pero solo hoy comprendí la gravedad del asunto cuando lo vi haciendo esfuerzos sobre humanos por justificar todos y cada uno de los puestos de trabajo. Este mismo día tuvo que darse el tiempo para ir por su hija a la escuela ya que su esposa esta en el hospital cuidando de su madre y por si fuera poco se dio el tiempo de explicar a mi compañero los errores cometidos en la última licitación.

Además de eso, hablo con su padre que ya tiene tiempo no ver y le vi lamentarse por no tener tiempo para visitarlo, la semana que viene es su aniversario de bodas y a pesar de las circunstancias me pidió como favor personal le consiguiera un trío porque en palabras suyas ?la llama nunca se debe apagar?. Todos lo días se toma al menos un par de minutos para llamar a su esposa y decirle que la ama, procura que nadie se quede tiempo extra y cuando es necesario agradece de mano a todos el tiempo invertido.

Los domingos lo he visto correr en el parque o vigilar a su hijo mientras juega o pasea en bicicleta, siempre saluda a su esposa con un beso y un ?te quiero?, nunca pierde oportunidad de presentar a sus hijos y esposa aunque sea en fotografía, es severo cuando debe serlo pero no deja de conmoverse ante la desgracia de los demás, en las reuniones sirve a los demás como agradecimiento a las horas invertidas en el trabajo.

Solo hasta hoy entendí porque ese tipo que en ocasiones me parece algo distraído y hasta retrasado es digno de admiración, por eso y por muchas cosas que he omitido en este escrito hoy aprendí a admirar a mi jefe.


1 comment(s):

SINCERAMENTE , AVECES NO COMPRENDEMOS POR QUÉ NUESTROS JEFES SUELEN SER TAN DISTRAÍDOS. A MÍ ME PASO LO MISMO, CUANDO DESEABA HABLAR CON MI JEFE SENTÍA QUE NO LE IMPORTABAN MUCHO MIS IDEAS, PERO HE COMPRENDIDO AL FIN, QUE SE DEBE A SUS MÚLTIPLES OCUPACIONES. ES ADMIRABLE SABER QUE PESE A LA PRESIÓN DEL TRABAJO , NO DEJA DE HACER ALGUNAS BROMAS CON NOSOTROS, QUE SE TOMA EL TRABAJO DE LLAMAR A SU MADRE Y COMPAÑEROS MIENTRAS VIAJA HORAS DESDE LA MADRUGADA A LAS ZONAS DE LA ORGANIZACÍÓN, PUDIENDO APROVECHAR ESOS MINUTOS PARA ASEGURAR UNA PEQUEÑA SIESTA, QUE SE MUESTRA ORGULLOSO DE SUS ESPOSA E HIJAS, Y QUE DEPOSITA ABSOLUTA CONFIANZA EN LA GENTE QUE LE RODEA. QUE TE OFRECE PLENA LIBERTAD EN TU TRABAJO Y QUE SIEMPRE TE PIDE QUE NO LO TRATES CON DEMASIADA COORDIALIDAD SINO COMO UN AMIGO MÁS.
NUNCA SE LO HE DICHO , MUCHO MENOS AHORA QUE MI CONTRATO TERMINÓ. PERO SÉ QUE MUCHOS QUISIERAN DECIRSELO.

By Blogger LEYDI MUÑOZ, at 9:58 p.m.  

Pasele marchantito

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